Consciencia en animales

segun la Declaración de Cambridge sobre la Consciencia 

«De la ausencia de neocórtex no parece concluirse que un organismo no experimente estados afectivos. Las evidencias convergentes indican que los animales no humanos tienen los sustratos neuroanatómicos, neuroquímicos, y neurofisiológicos de los estados de la conciencia junto con la capacidad de exhibir conductas intencionales. Consecuentemente, el grueso de la evidencia indica que los humanos no somos los únicos en poseer la base neurológica que da lugar a la conciencia. Los animales no humanos, incluyendo a todos los mamíferos y pájaros, y otras muchas criaturas, incluyendo a los pulpos, también poseen estos sustratos neurológicos.»

—Cambridge University, UK.

La consciencia no tiene que ver con la inteligencia de un ser vivo y su capacidad neuronal, afirma el neurólogo Anil Seth en una conferencia en Julio de 2017. "no tienes por que ser inteligente para sufrir, pero probablemente deberás de estar vivo"  

Muchos experimentos realizados con animales como delfines, perros, chimpancés, han demostrado que conocemos menos de lo que creemos sobre estas criaturas y es cada vez más sorprendente la capacidad cognitiva e inteligencia de estos animales, consideramos que nuestra capacidad de ser conscientes nos diferencia del resto de seres vivos, sin embargo, la capacidad de reconocerse como un ser único, diferenciado del resto, no es exclusiva de nuestra especie. Los humanos existimos como individuos, cada uno con sus características propias y únicas. Este hecho es algo indispensable para nuestra supervivencia, vivimos en complejas comunidades gracias a que podemos reconocernos a nosotros mismos, y a los rasgos personales de los demás.

 


Uno de los experimentos más famosos y verídicos es el "experimento del espejo". En este experimento se muestra a varios animales un espejo, algo desconocido para ellos, en el cual se refleja su propia imagen. El objetivo es observar el comportamiento de estos animales y comprobar si son conscientes de que es su propia imagen reflejada, y no otro individuo ajeno a él, y por tanto, si son conscientes de su propia existencia. Para probarlo mejor se le pinta una marca de un color el la cara del animal. En niños humanos, orangutanes...jóvenes se dan cuanta de que hay algo extraño en su reflejo y se llevan la mano a la mancha.